27.1.11

Lo mejor me espera en mi hogar.


Me gustaría ir a París, mientras me subo a lo alto de la Torre Eiffel y veo toda Francia. ¿Después? A Italia, donde me haré la típica foto donde yo, con toda mi fuerza y valentía, sujetaré la Torre de Pisa para que no se caiga. ¿Luego? A Londres, donde intentaré hacer reír a los guardias de seguridad con mis caras más extrañas y mis chistes malos. ¿Siguiente? A Las Vegas, donde me gastaré la ostia de dinero en el casino para no ganar ni una moneda, pero podré decir: ¡Viva a Las Vegas, baby!. ¿Aún más? Pues me iré a Nueva York, sí, y me subiré a la Estatua de la Libertad y veré como todo Manhattan amanece. ¿Y por último? Yo siempre digo que lo mejor, para el final. Por último me iré a Los Ángeles. Arrasaré en todas las tiendas de Beverly Hills, mientras me gasto casi todos los ahorros que me quedan en ropa. Luego, en Hollywood, iré mirando cada una de las estrellas del Paseo de la Fama y me haré una foto con la inmensa mayoría mientras sonrío bebiéndome mi Starbucks. También, me haré fotos junto al cartel de Hollywood, señalándolo con una gran sonrisa en mi cara diciendo: Sí, estoy en L.A. Y al final, me subiré a lo alto del mirador y miraré por última vez todo Los Ángeles. 

Pero cuando vuelva aquí, a España, me esperará lo mejor. 
Me espera miles de fotos que realice y que compartiré con los demás. 
Y eso me agrada.

24.1.11

Que sean felices y coman perdices.

Otro arco iris que pasa de largo.
¿Qué quieres que le diga? ¿Que me muero de rabia por no tenerlo? ¿Que estoy celosa? ¿Que quiero que la deje y se venga conmigo y solo conmigo? No soy de esas. Lo pienso, sí...Pero de alguna manera tengo que descargarme, ¿no? No soy ese tipo de personas, que quiere que le pide a otras personas que dejen todo por irse con ella; si la persona a la que quiero, está bien, feliz y agusto como y con quien está...Pues mira, oye, le animo a que siga adelante. Le ayudaré si hace falta, si pide algún consejo. Pero...pero nada, que me alegro. Que no estoy mal, ¡ni mucho menos!. Me siento rara, en plan bien.
No me habrá salido bien esta jugada, pero otra sí. 
¿Qué quiero que esa relacion se termine lo antes posible? 
No te lo voy a negar. Mientras tanto, ajo y agua. 

20.1.11

Memorias de la página de un libro.


Soy la siguiente. Noto otra vez ese emocionante cosquilleo como si fuera la primera vez. En unos instantes me mostraré ante mi nuevo lector y tendré apenas un minuto, el tiempo que suelen tardar en recorrer mis 734 palabras, para sentir el tacto de sus dedos, para comprobar ansiosamente el lugar donde me encuentro revisando los títulos en las estanterías, buscando fotografías enmarcadas que me hablen de la vida de aquel que me lee, y sobretodo para ver sus ojos, su expresión … especialmente en el momento en que leen aquella frase en mi segundo párrafo: “El corazón, si pudiera pensar, se pararía” ... sí, todos se detienen durante unos instantes tras leer esa frase, nadie queda indiferente. Me encanta mirarles en ese momento, sentir lo que están pensando, leerles mientras me leen.
No puedo desaprovechar ni una décima de segundo, no sé cuando será la próxima vez, ni siquiera si la volverá a haber . No, no puedo desperdiciar ni una sola emoción, ni un solo gesto, ni una sola mirada, tengo que empaparme de todas las intensas sensaciones que voy a vivir para poder rememorarlas, vivir de su recuerdo durante el largo océano de oscuridad que vendrá después.

!Ya está ahí, ya viene!

18.1.11

Si, como una regadera.

-Creo que me estoy volviendo loca... ¿Tú que piensas?

-A ver, ummm... Sí, como una regadera, chalada, chiflada, majara, loca de atar...

Pero te voy a contar un secreto; Las mejores personas lo están.

11.1.11



















-Tú sólo me odias por un motivo. Porque te mata saber que podrías haber sido completamente feliz a mi lado y que lo echaste a perder. Porque eres orgulloso y prefieres odiarme que admitir que te equivocaste. Es una actividad fácil y entretenida, porque le dedicas mucha energía. Me odias porque no quieres lo contrario. No quieres admitir que soy la pieza que te falta.
- ¿Ah sí, y tú sabes todo eso mejor que yo? ¿Tan lista te crees?
- Sólo hay una diferencia entre tú y yo ahora mismo. No soy más lista, pero es por esa diferencia que yo veo y tú no.
- Sorpréndeme. ¿Cuál?
- Yo tengo los ojos abiertos.

8.1.11

Fóllame el corazón. Viola mis sentimientos. Acelera mis latidos. Hazme sólo tuya y dime que no ha sido tu culpa. Arrástrame al olvido. Recuérdame el dolor. Condena a mi orgullo. Rómpeme en pedazos y dedícate a desordenarlos. Prioriza mis sentidos. Lucha contra mí. Contra mi otro yo. Inventa uno nuevo. Úsame. Miente y dí que es una verdad a medias. Tira de mí sin atarme. Invítame a cenar. Dejame ser una rana y con un beso, convertirme en persona. Conviérteme en la gata negra que hay por las noches en tu tejado. Emborracha a mi razón. Aprende a describirme. Exagera mis defectos. Prohíbeme volver a verte. Ponle música a mis gritos. Haz oidos sordos a mis auxilios. Enséñame a perder. Tiémblame las orejas. Báilale a mis miedos. Desequilibra mis principios. Dinamita mis prejuicios. Explica mis delirios. Invítame al caos y píntalo de azul. Lánzame tus mierdas. Despéiname. Jódeme un domingo. Descóseme los hábitos. Despiértame a las tantas y dime que me odias. Arregla los problemas con te quieros. Provócame un infarto. Prométeme imposibles. Engaña a mi mirada. Llévame lejos para devolverme al principio. Improvisa un final.
Pero con tan solo tenerte presente en mi vida, me basta y me sobra.

7.1.11

Huir fue la ultima de mis opciones.


Que estás a oscuras y no te veo. Enciendo una cerilla y mis ojos no se adaptan nunca a la luz. ¡Auch! Me quemo con cada cerilla que prendo. Tontamente, tengo los dedos llenos de ceniza, el alma con quemaduras y los ojos rojos del dolor.
Busco a tientas. Acaricio la pared con las manos. Escucho sus pensamientos. Está cerca.Te he encontrado, pero sigo sin verte. Intento sentirte, pero las yemas de mis dedos se han quedado sin sentido. No me rindo. Mis manos bailan en tu cuerpo. Las tuyas me hacen cosquillas. Río. Reímos.
Tengo miedo. Has dejado de tocarme. No te percibo. Odio la oscuridad.
Oigo ruidos. Pisadas fuertes.
Quiero huir, no sé dónde. Echo a correr y los ruidos corren conmigo.
Choco con las paredes pero quiero atravesarlas y huir al vacío...

5.1.11

Y me sentía tan bien...

Puedo darme cuenta del amor de los otros hacia a mi y hacia los demás. Supongo lo que es e intento mostrárselo a los míos. Pero mostrar expresiones de desprecio también es otra de mis formas de hacerlo saber.
Puede ser casualidad, pero no creo en las casualidades. Conocerte hizo que fuese más fácil decir un simple "te quiero". Lo sé, soy una mujer fría, pero tú eres tan cálido...
Cada abrazo y cada beso en la mejilla me da paz y me descongela. Todo se ve fácil a tu lado y eso me gusta, las facilidades. Pero no, no quiero arriesgarme. Sé lo que supone darte un beso en el lugar equivocado. Y sé lo que es perder a un amigo de tu categoría en mi escala de valores y por eso no volveré a jugármela.

"Sentí que mi existencia era como el tamaño de un mosquito, cuando llegaste por la espalda y me abrazaste, rodeándome con tus cálidos brazos."

3.1.11

Que solos se quedan los ancianos.

Cuando el tiempo es tu pariente más cercano. Cuando solo una canción te devolverá el pasado .Ojos cansados. Mirada perdida. Estampida de anhelos .Cuando ya no reconozcas a ese extraño en el espejo. Cuando quieras hablar, cuando nadie te escuche. Inútil. Cuando te peines, cuando te duches. Dirás que tristes que solos se quedan los viejos.
Cuando descubras que nada es eterno y se te quiten hasta las ganas y se te pudran hasta las canas. Tu piel y la gravedad, de casa al médico. Famélico por dialogar, histérico de soledad. Regalando consejos de los que se rían. Esos locos borrachos de sabiduría.
Tu pasos cortos cuando te fallen las piernas , extenderás el brazo buscando una mano tierna. Querrás hacerlo todo y no darás abasto. Has tocado fondo, amigo ya eres un trasto, viejo, un mueble. Cuando ya no les conmueves, mirarás el reloj esperando a que llegue.
Cuando pierdan el respeto a los zurcos de tus arrugas. Cuando te sientas torpe, ojalá que no estorbes. Cuando te lleve la pena, esperando visita. No te asomes a la puerta, ellos no te necesitan. Hijos, nietos, sobrinos, amigos, cuando te aprendas de memoria la foto de la mesita. Padres, abuelos, tíos, vecinos. Aquellos que te querían, todos se han ido. Mujeres, hombres, fechas, nombres. Y tú, que aún existes, buscando motivos.
Cuando tu felicidad sea el recuerdo. Cuando tu voz no suene, serás una imagen. Tu piel el polvo de la Vespa del garaje. Cuando, cuando ya no haya cuando’s. Dirás, que tristes que solos se quedan los viejos. Que tristes, que solos.